Javier Jiménez - Crónica
Después de un partido
bajo la manta de agua que caía del cielo, la República Checa se
impuso por un gol a cero a la anfitriona del campeonato junto con
Ucrania. El gol checo vale una clasificación que finalmente tras la
sorpresa del otro partido, la hace pasar como primera de grupo.
Polonia
comenzó como un rayo el partido. Muy asentada en el terreno de juego
y llevando la batuta del encuentro. Parecía clara favorita para
clasificarse hoy debido a lo visto durante los primeros minutos en el
terreno de juego.
Fue
primero Boenisch el que mandó un balón rozando el palo de la
portería de Cech y posteriormente Polanski que desaprovechó un uno
contra uno frente al meta. Este indeciso mandó el balón alto para
desesperación de la afición local.
Los
checos más conformistas, se limitaban a esperar y desbaratar como
podían los ataques de Polonia e intentar sacar el balón a la contra
con gente como Baros y Pilar. El
césped aguantaba la lluvia pero si seguía lloviendo de esa forma
durante mucho tiempo se haría imposible seguir jugando. La República
Checa estaba más cómoda bajo la lluvia y Baros desaprovechaba la
mejor oportunidad del partido, al no conseguir rematar un balón que
le quedó franco ante Tyton.
A
pesar del inicio impresionante de Polonia con un gran juego llevado a
cabo por sus atacantes, el último tercio de la primera mitad se vino
abajo fruto del desgaste de los primeros minutos. Parecía que se
daban un respiro antes de que empezara la segunda parte. Pero
realmente fue durante el resto del encuentro ya que Polonia poco pudo
hacer el resto de los minutos que lo separaban de clasificarse si
marcaban gol.
Para
colmo de males, los anfitriones se llevaban una mala noticia ya que
Grecia al borde del descanso contra todo pronóstico marcaba gol y se
clasificaba para la siguiente fase de la competición. Les hacía
falta un gol tanto a la República Checa como a Polonia para
clasificarse.
Finalmente
la alegría llegó por el bando visitante tras una jugada de Baros y
Jirácek que hizo que a falta de 18 minutos, estos se adelantaran en
el marcador para ponerse primeros en la clasificación y mandando a
Rusia a casa con un gran juego desplegado pero con falta de puntos
para clasificarse a la siguiente fase. En cuanto a Polonia necesitaba
dos goles en el último cuarto de segunda mitad para conseguir la
clasificación.
Un
empate no servía a ninguno de los dos equipos que se encontraban en
el cesped. Polonia intentó una presión final para conseguir que el
empate pusiera nervioso a los checos y aprovechar la coyuntura. La
República Checa perdía tiempo en cada jugada, de forma muy fea,
quedándose en el terreno de juego tumbados o haciéndose los locos
en los cambios.
Wasilewski
la tuvo en el último minuto para sacar a la República Checa de la
Eurocopa pero el balón se marchó desviado por centímetros.
Lewandoski también la tuvo pero se encontró con Selassie que sacó
el balón de dentro de la portería practicamente.
Así
quedo todo. Comienza la Eurocopa en estado puro. Primer grupo
decidido, primera sorpresa. Rusia con su gran juego desplegado en los
dos partidos anteriores se queda fuera junto con Polonia que bajo el
mando de Lewandoski era una de las apuestas a equipo revelación.
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